En la Manhattan de China me perdí por sus calles fascinado con las diferencias entre los altos edificios y construcciones de no más de dos plantas.
Una tierra de contrastes que depende de que fotografías mires parece que estés mirando un poco hacia el futuro. Si solo te fijas en la alta arquitectura y autopistas llenas de coches, no parece China.
Como ya te he enseñado en otras entradas sobre Shanghái, con solo alejarte un par de manzanas puedes encontrarte con calles modestas de casas bajas.
La última es un claro exponente de esos contrastes, y con toda la ropa tendida en las ventanas.
Por lo que he leído parece que sigue habiendo muchas casas minúsculas de la época de la revolución de Mao en que los pisos se dividieron a razón de una habitación por família o dos si eran muchas personas. :-/
¿Verdad que sí?
No sabía lo de los pisos. ¿Te refieres a los pisos en los edificios altos o en las casas pequeñas?
Coincido con Helena, en la última se aprecia a la perfección.
Gracias Óscar 😉