El pueblo de Volendam – Amsterdam


En el viaje a Amsterdam queríamos ver un poco la Holanda rural así que cogimos un autobús con destino a Volendam.

Fue todo un problema llegar hasta la estación de autobuses, está muy mal indicado. Tienes que ir preguntando a los conductores de los autobuses desde donde sale el tuyo. Con mala leche te indicaran, no muy acertadamente, el camino. Si tienes suerte, lo encontrarás.

Fue subir al autobús y empezar a ver vacas, cabras y pastos verdes super extensos. Menudo cambio con respecto a las calles llenas de bicicletas de la capital y que que son tan solo 20km.

Con un diluvio universal sobre nuestras cabezas, llegamos y paseamos por las calles cerca del puerto. Desgraciadamente esa zona estaba llena de tiendas de souvenirs.

Nos apartamos un poco y descubrimos que ese pueblo era (o parecía) realmente tranquilo. Bonito, un poco como de cuento. Ya sabes, casitas unifamiliares con tejado triangular, bajitas, sin rejas, con jardín…

No había mucho más que hacer más allá de comprar dulces tradicionales así que cogimos el autobús de vuelta a la capital.

Fue una visita corta pero valió la pena conocer las afueras de Amsterdam.


7 comentarios

los pueblos son mejores que las ciudades… siempre lo he pensado, y los hay muy chulos y tyrankilos a escasos minutos de grandes concentraciones…
Mi favorita, la foto del gato!

Helena

Las casitas son monísimas y sin rejas! El gato también me gusta, y más despues de haver leído «Maldito Karma» 😀

Pese a los autobuseros rudos merece la pena escapar unos instantes de la ciudad de las bicis 😀

Deja tu comentario
*
*